Es un parque de más de 34 hectáreas donde se recrean los tres grandes hábitats de la Naturaleza: el agua, la tierra y el aire, en los que se encuentran diversas especies autóctonas y de otras regiones del mundo. Está conformado por tres grandes sectores:
- La Zona Africana, con flamencos, pelicanos, antílopes, suricatas, lémures, colobos, cebras e hipopótamos.
- La Zona Asiática con tigres, murciélagos frugívoros y ardillas, entre otros.
- La Zona de Especies autóctonas, con dos grandes aéreas: La Mesopotamia y la Patagonia.
El Acuario es un fascinante ámbito, cuyo recorrido comienza con la Poza de Marea, que representa un ambiente del litoral marítimo que se inunda y escurre por acción de las mareas; continua en el Acuario de Agua Dulce, que recrea un rio de la Mesopotamia; y finaliza en el Acuario Marino, con peces del Mar Argentino.
- La Zona Africana, con flamencos, pelicanos, antílopes, suricatas, lémures, colobos, cebras e hipopótamos.
- La Zona Asiática con tigres, murciélagos frugívoros y ardillas, entre otros.
- La Zona de Especies autóctonas, con dos grandes aéreas: La Mesopotamia y la Patagonia.
El Acuario es un fascinante ámbito, cuyo recorrido comienza con la Poza de Marea, que representa un ambiente del litoral marítimo que se inunda y escurre por acción de las mareas; continua en el Acuario de Agua Dulce, que recrea un rio de la Mesopotamia; y finaliza en el Acuario Marino, con peces del Mar Argentino.
En este parque, inaugurado en julio de 2001, todo está pensado para lograr una interacción respetuosa entre humanos, flora y fauna. El entorno es agreste y en algunos rincones oímos una tranquila música funcional que no altera el equilibrio del lugar.
Fuente: Temaikén
Fuente: Temaikén
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